La jueza federal de San
Isidro cursó el exhorto a través de la Cancillería argentina en el que pidió
que Kueider sea trasladado detenido junto a su secretaria Iara Guinsel Costa.
Además pidió una serie de medidas de prueba a sus pares paraguayos, como el
secuestro de teléfonos celulares y otros elementos que ambos llevaban cuando
intentaron cruzar a Paraguay con 211.000 dólares sin declarar.
Arroyo Salgado pidió
que las fuerzas paraguayas allanen el departamento de Asunción donde Kueider y
Costa cumplen arresto domiciliario y se envíen a la Argentina los elementos que
puedan servir a la investigación, en especial los dispositivos electrónicos.
Arroyo Salgado
investiga si el expulsado senador es propietario de tres departamentos en una
torre de Concordia, que están a nombre de una sociedad "Betuil" que
le pertenece y que no podría justificar con sus ingresos en la función pública.
Como Kueider ya no
tiene fueros parlamentarios, puede ser detenido en Argentina, pese a que
presentó un amparo para que se revierta la expulsión.
La imputación a Kueider
es por delitos como enriquecimiento ilícito, abuso de autoridad, incumplimiento
de deberes de funcionario público, cohecho pasivo y activo, negociaciones
incompatibles y lavado de activos.